Cuenca, Ecuador. – En un acto cargado de fe, simbolismo y protesta, este viernes se realizó la caminata de la Virgen de las Aguas hasta el páramo de Quimsacocha, en el cantón Cuenca, provincia de Azuay. Cientos de personas participaron en la movilización que busca visibilizar el rechazo ciudadano a los proyectos de explotación minera en esta zona protegida.
La jornada inició con una ceremonia religiosa celebrada en la Catedral de la Inmaculada Concepción, presidida por el arzobispo de Cuenca, Monseñor Marcos Pérez, quien bendijo la imagen de la Virgen y expresó un mensaje de unidad en torno a la defensa de la naturaleza y el agua.
Posteriormente, una caravana conformada por feligreses, colectivos ambientalistas, comunidades indígenas y ciudadanos comprometidos con la causa, se trasladó hasta los páramos de Kimsakocha (Quimsacocha), donde se realizó un acto simbólico de entrega de la Virgen como “protectora del agua”.
✊ Un acto de fe y resistencia
La caminata no solo tuvo un carácter religioso, sino también social y político. La imagen de la Virgen se ha convertido en un símbolo de lucha en defensa de las fuentes de agua y los ecosistemas de páramo, que podrían verse afectados por actividades extractivas.
“El agua es vida y no puede ser negociada. Traemos a la Virgen como protectora de nuestra tierra”, expresó una participante del evento, habitante del sector de Tarqui.
El acto fue respaldado por organizaciones como el Colectivo Yasunidos Cuenca, la Coordinadora de Defensa del Agua y la Vida, y diversos grupos parroquiales del Azuay.
🏞️ ¿Qué pasa en Quimsacocha?
El páramo de Quimsacocha, ubicado al suroeste de Cuenca, es una zona de alta biodiversidad y una de las principales fuentes de abastecimiento de agua para los cantones de Cuenca, Girón y San Fernando.
A pesar de ser un ecosistema frágil y protegido, la zona ha sido objeto de controversia debido a la concesión de proyectos de minería metálica a gran escala, lo que ha generado resistencia por parte de las comunidades locales, que temen impactos irreversibles en las fuentes hídricas.
En 2019, los habitantes de Girón rechazaron contundentemente la minería en una consulta popular con el 86% de votos en contra. Sin embargo, los movimientos ciudadanos continúan en alerta ante nuevas intenciones de explotación minera en la región.
📌 Un llamado al Estado
Los participantes de esta caminata exigen al Estado ecuatoriano:
- El respeto al mandato popular expresado en la consulta.
- La prohibición definitiva de la minería en ecosistemas de páramo.
- La protección integral de los derechos del agua y la naturaleza, como lo establece la Constitución del Ecuador.





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