La Empresa Pública Municipal de Movilidad (EMMOV), con sede en el cantón Centinela del Cóndor, atraviesa un momento crítico que compromete la continuidad de sus operaciones como centro técnico de matriculación y revisión vehicular en la provincia de Zamora Chinchipe.

Creada en diciembre de 2014, esta institución fue concebida para brindar servicios especializados en el área de tránsito, convirtiéndose en un referente para los cantones que conforman la Mancomunidad del Sur: Centinela del Cóndor, Palanda, Chinchipe, Yacuambi, Nangaritza y Paquisha.

Durante años, la EMMOV mantuvo una atención técnica eficiente, con cobertura provincial y usuarios provenientes incluso de otras regiones del país, como Loja y Morona Santiago. Su estructura operativa llegó a contar con personal capacitado y oficinas activas en distintos cantones.

Hoy, sin embargo, enfrenta una serie de desafíos relacionados con la estabilidad operativa, la gestión de recursos y la legalización de su funcionamiento ante los organismos nacionales de control, particularmente la Agencia Nacional de Tránsito (ANT).

Técnicos y trabajadores han expresado su preocupación por el retraso en los procesos de acreditación y han solicitado que se prioricen acciones orientadas a la regularización de servicios, actualización de equipos y fortalecimiento de la estructura institucional. Asimismo, consideran fundamental que se garantice la continuidad de la empresa bajo parámetros técnicos sólidos y una planificación a largo plazo.

Otro de los puntos críticos es la sostenibilidad financiera. Aunque la empresa aún opera gracias a fondos acumulados, el escenario actual exige una reestructuración responsable para evitar su paralización total.

Ante esta situación, se ha solicitado la intervención de entidades de control como la Contraloría General del Estado, con el objetivo de revisar los procesos administrativos y asegurar la transparencia en la toma de decisiones.

La EMMOV ha sido una pieza clave en el sistema de movilidad del sur del país. Su fortalecimiento no solo es necesario para los cantones que integran la mancomunidad, sino también para los cientos de usuarios que dependen de sus servicios técnicos para cumplir con la normativa vehicular vigente.