Autoridades colocaron la primera piedra de una obra que promete modernizar la oferta comercial, generar empleo y dinamizar la economía local.

En un acto oficial realizado este miércoles, autoridades del cantón El Pangui colocaron la primera piedra del que será el nuevo Centro Comercial, una obra emblemática que, según las autoridades, busca transformar la dinámica económica y comercial de la zona.

La infraestructura contará con una inversión significativa proveniente de la Secretaría Técnica de la Amazonía, entidad que ha destinado recursos para impulsar proyectos orientados al desarrollo sostenible en la región. El aporte institucional responde a una estrategia regional para fortalecer la infraestructura productiva y comercial en cantones con potencial de crecimiento.

El alcalde Jairo Herrera, en su intervención, calificó el proyecto como “un antes y un después” para El Pangui. Señaló que el centro comercial ofrecerá espacios modernos y adecuados para emprendedores y comerciantes locales, además de servicios que beneficiarán a la ciudadanía. Herrera subrayó que la obra generará empleo durante la fase de construcción y que, una vez operativa, potenciará el movimiento económico del cantón.

Además de la colocación de la primera piedra, el alcalde informó sobre otras obras y proyectos en marcha dentro de su plan de trabajo, orientados a fortalecer la infraestructura urbana, mejorar servicios públicos y promover el bienestar de los habitantes. Estas acciones se presentan como parte de una visión integral para mejorar la competitividad local y la calidad de vida.

La ciudadanía y representantes de instituciones locales participaron en el evento y valoraron positivamente la iniciativa, que —afirmaron— traerá nuevas oportunidades para comerciantes y emprendedores, facilitará el acceso a bienes y servicios y contribuirá al crecimiento ordenado del cantón.

El impulso de un centro comercial financiado por instancias regionales puede ser un catalizador importante para El Pangui si se acompaña de políticas integradas: promoción de micro y pequeñas empresas, acceso a financiamiento para comerciantes locales, control del impacto urbano y capacitación para gestión comercial. La obra promete dinamizar la economía, pero su éxito dependerá de la articulación entre el sector público, privados y la comunidad para garantizar que los beneficios —empleo, formalización y acceso a servicios— se distribuyan de forma equitativa y sostenible.